Tras dos meses sin escribir nada
en el blog, y después de reflexionar sobre si eliminarlo o seguir con él, he
decidido retomarlo. Aun consciente de que la falta de tiempo material para
escribir puede acabar haciendo que tarde o temprano lo cierre.

 

No obstante he querido retomarlo
tratando un tema de denuncia de una realidad que además de grave e injusta me
parece poco conocida en Euskadi.

 

Alfonso Fernández, un joven de
apenas 21 años del madrileño barrio de Vallekas fue detenido junto a su
compañera durante la jornada de Huelga General del pasado 14 de Noviembre. Una
detención llena de irregularidades y tras la cual “Alfon” ingresó en prisión a
la espera de juicio. A día de hoy sigue en prisión.

 

La detención de Alfonso y su
compañera se produjo apenas dos minutos después de que estos salieran del
portal de su casa, cuando tenían intención de dirigirse al punto de encuentro
de los piquetes para la Huelga. Primera
irregularidad, le detienen a uno cuando sale de su casa, antes de hacer nada.
Es lo que tiene ser una persona conocida en el barrio por su compromiso social
y de izquierdas, que la policía sabe donde ir a buscarle.

 

Según la policía, Alfonso llevaba
una mochila con material para fabricar explosivos. Y “casualmente” le registran
a la salida de su casa y le pillan con ella. La policía está esperando que
salga de su casa alguien que no tiene antecedentes penales, ni detenciones
previas, el asunto huele desde luego a encerrona.

 

El joven niega la acusación y yo
le creo entre otras cosas porque tuve la oportunidad de escuchar a su madre en la Asamblea Federal
de IU, porque él lo niega categóricamente y porque según el propio informe
policial la bolsa no tiene huellas dactilares de Alfonso que no llevaba
guantes.

 

A partir del arresto, cúmulo de
irregularidades:

 

Se decreta prisión preventiva por
Alarma Social, cuando la ley no contempla la Alarma Social como causa para
la prisión preventiva en la Ley
de Enjuiciamiento Criminal. Cuando el abogado de Alfonso recurre la prisión
preventiva por este hecho, se cambia el hecho y se alega por parte de la jueza
Riesgo de Fuga. Riesgo de Fuga a un chaval de 21 años que no forma parte de
ninguna banda criminal, con fuerte arraigo en el barrio, novia en el barrio,
trabajo en la ciudad, domicilio en casa de su madre en el mismo barrio. Es
decir, tras la decisión de mantener a Alfonso en prisión hasta el juicio, hay
una descarada consigna política y punto.

 

La situación de prisión de Alfon,
es además especialmente grave por que está en régimen de Aislamiento FIES 5, un
régimen especial que se aplica a los reclusos condenados por delincuencia
internacional, terrorismo etc…

 

Tal como explico la madre de
Alfonso, ha sido sometido a interrogatorios por parte de policías encapuchados
cada dos horas, se le revisa el correo y se le cortan las comunicaciones con la
familia.

 

El pasado 28 de Diciembre en
diferentes lugares del estado y del extranjero se celebraron concentraciones y
manifestaciones denunciando estos hechos y pidiendo la libertad de Alfon. Aquí
en Donostia nos juntamos un grupo de unas 50 personas delante de los juzgados
de Atotxa. Hemos cambiado de año, y Alfon sigue injustamente secuestrado por el
estado.

 

El caso de Alfon es muy claro;
había que buscar un cabeza de turco para ir metiendo el miedo en el cuerpo a la
gente que no se resigna a agachar la cabeza contra la dictadura del capital que
estamos sufriendo. Porque saben que este año que acaba de comenzar va a ser un
año de muchísima lucha social, confrontación y movilización, así que han
empezado con la represión preventiva.

 

No nos callarán.

Ni cautivos, ni vencidos.

 

ALFON LIBERTAD!  ALFON ASKATU!